Foto de un muñeco de Lego en Google GogglesComienzan a aparecer voces que denuncian los peligros potenciales de aplicaciones para smartphones como Goggles (de Google). Esta herramienta permite analizar una fotografía tomada con la cámara de un Android y realizar una búsqueda basada en lo que la aplicación reconoce de la misma (textos, logotipos, imágenes completas…). Incluso, con su última actualización, permite compartir socialmente los resultados de dicha búsqueda (junto con datos como las coordenadas donde fue tomada la foto) por medio del correo electrónico o de las redes sociales online (p.ej. Twitter). De hecho Google anima a realizar esa compartición porque les permite ir afinando y mejorando la capacidad de búsqueda de imágenes.

Inmediatamente nos surge el temor de que este tipo de aplicaciones sean usadas para el reconocimiento facial. Imaginemos alguien que nos saca por la calle una foto de nuestro rostro, y que la aplicación es capaz de relacionar dicha foto con otras presentes en Internet y asociadas con nuestro nombre. Inmediatamente el portador del Smartphone podría saber nuestro nombre, todos los datos personales accesibles online sobre nosotros y cualquier otro detalle de nuestra vida online. Y al revés: si lo difunde, podría enterarse toda la Red de nuestra ubicación exacta en esos instantes.

De hecho Google afirma que lleva tiempo trabajando en que su aplicación Goggles (que significa anteojos en inglés) pueda realizar precisamente este tipo de reconocimiento facial, y su competidor Apple adquirió hace unos meses una compañía especializada en este tipo de aplicaciones. Los responsables de Google se limitaron a declarar a CNN que la privacidad seguía siendo una preocupación para el desarrollo de estas capacidades, y que sólo las pondrían en marcha una vez de que tuviesen previstos modelos de privacidad aceptables, aunque no indicaron aceptables para quién.

De momento estas aplicaciones para móviles parece que aún no permiten identificar a personas, pero debemos estar atentos para un riesgo potencial en el inmediato futuro. Y aunque cuente con algún sistema para proteger la privacidad, parece difícil que se pueda autoproteger la persona que no usa el smartphone sino que es la persona fotografiada y potencialmente identificada y geolocalizada. Una vez más la prevención es la clave y si evitamos que haya información (incluyendo fotografías) nuestra accesible publicamente en la WWW, será la única manera eficaz de evitar totalmente este tipo de problemas. Una vez más, el mensaje debe ser ¡Cuida tu imagen online!




Fuentes: SocialTimes y IBTimes. Fotografía: Robin M. Ashford.