Bajo el nombre “Internet y videojuegos aplicados a la educación para la convivencia y ciudadanía digital”, PantallasAmigas, impartió una  conferencia de dos horas de duración a la que asistieron diversos profesionales del mundo de la educación.

El Centro de Cultura Digital es un espacio dedicado a la producción, difusión, educación y reflexión de las manifestaciones sociales, culturales y económicas de este mundo cada vez más tecnológico. El Centro fue el escenario ideal para la charla en el que se mostraron dos ejemplos prácticos de cómo usar los videojuegos para promocionar valores como la solidaridad, el respeto o la cooperación en Internet y promover de esta forma una ciudadanía digital responsable. Los asistentes pudieron conocer cómo se puede trabajar la empatía y fomentar la convivencia en las redes sociales a través de un juego diseñado para Microsoft Kinect, para evitar de esta forma el ciberbullying.

Charla sobre videojuegos educativos para la ciberconvivencia en el Centro de Cultura Digital

Charla sobre videojuegos educativos para la ciberconvivencia en el Centro de Cultura Digital

El segundo videojuego que se presentó, desarrollado para Android y iPhone, trató sobre la privacidad en el uso del smartphone para concienciar a niños, niñas y adolescentes de que cuanto más se sepa sobre ellos, más vulnerables serán. Su objetivo es desarrollar una cultura de la privacidad desde el primer momento en que se adquiere un teléfono celular, y permitir que niños, niñas y adolescentes puedan desenvolverse de manera autónoma y segura en Internet.

La generación de una cultura de la privacidad y el fomento de la convivencia en entornos digitales son objetivos que están más cerca gracias al uso de los videojuegos aplicados a la educación. Los videojuegos cuentan con unas características óptimas para el aprendizaje de conceptos, procedimientos y, sobre todo, actitudes y valores. En los videojuegos, fallar está permitido y fallar es parte del proceso de aprendizaje, lo cual posibilita guiar a los estudiantes y acompañarles en su crecimiento como ciudadanos digitales y analógicos, siendo el objetivo final que desarrollen las habilidades y competencias digitales que les permitan participar de forma activa, positiva y saludable en la Red.