¿Cuánto tiempo de uso diario de Internet es el máximo adecuado?

Vamos a abordar una pregunta fundamental que muchas familias y cuidadores se hacen: ¿Cuánto tiempo de uso diario de Internet es el máximo adecuado para mis hijos?

¿Cuánto tiempo de uso diario de Internet es el máximo adecuado?

En un mundo cada vez más digitalizado, el acceso a Internet es una herramienta invaluable para el aprendizaje, la comunicación y el entretenimiento. Sin embargo, como en todas las cosas, el equilibrio es clave. Es importante reconocer que los estudios siguen señalando las consecuencias negativas para la salud física y mental de nuestros hijos cuando se abusa de esta herramienta.

Tenemos claro que usar las pantallas no es inocuo para ninguna persona. Pero en la infancia y la adolescencia, el tiempo que se dedica a las pantallas puede influir en el desarrollo de habilidades esenciales como por ejemplo las sociales, o producir ciertos problemas. Utilizar pantallas significa renunciar a la realidad presencial, así pues, pueden surgir problemas de sedentarismo, obesidad, trastornos del sueño, de salud visual, emocional y psicológica.

¿Cómo afrontar este reto?

Desde luego, si hemos llegado hasta aquí, significa que tenemos conciencia sobre los diversos riesgos frente al uso de las pantallas. Así que, ¡calma! Es una tarea continua y de aprendizaje también para las familias. En la era digital surgen dudas, y muchas; y la educación digital es la respuesta.

Si bien es cierto que en internet podemos encontrar contenido muy útil para el día a día, también es necesario reconocer que parte del mismo está diseñado para captar la atención de las personas. En cualquier caso, no ayuda a dejar a un lado las pantallas, y dedicar el tiempo a las cosas que realmente son importantes (¡incluso aburrirse!). Tenemos que pensar que si a muchas personas adultas nos puede llegar a ocurrir, no podemos dar por hecho que en la infancia podrán decidir desconectar; para los menores, aún es momento de aprender. Así pues, ¿cuándo dejar a un lado las pantallas? No hay fórmulas mágicas.

Desde luego, que el acompañamiento digital activo es imprescindible. ¿Cómo ofrecemos las pantallas? Además del tiempo, es necesario saber por qué y para qué se utilizan. Y ofrecer herramientas de forma segura, ¿por qué? Existen riesgos asociados al uso de las pantallas más allá del uso perjudicial: ciberseguridad, contenido inapropiado, grooming, ciberacoso, etcétera.

En concreto, tenemos que tener en cuenta que utilizar pantallas, incluso acompañados, requiere de madurez, así que, como figuras de referencia, tendremos que garantizar previamente ciertos mínimos como actividades de ocio, espacios para el ejercicio físico, periodos de descanso, de juego, y tiempo en familia no sólo de calidad, sino también de cantidad. Es fundamental equilibrar el tiempo online en función de la edad y madurez, con otras actividades que son vitales para el desarrollo y bienestar.

La OMS refiere que antes de los 2 años no es recomendable exponer a los menores a las pantallas. Incluso, se contempla ampliar el rango de edad, por los efectos perjudiciales (cognitivos y visuales) que produce el tiempo excesivo frente a las pantallas. Las pantallas no podrían sustituir a los chupetes, ni el tiempo de cuidado que se utiliza para comer, calmar, o conciliar el sueño.

Tampoco hasta los 6 años, cuando no debe de superar 1 hora diaria. No es de obligado cumplimento; ¡cuanto menos, mejor!

Podcast – Pantallas e infancia temprana, asunto delicado. Anna Ramis

En la etapa de la niñez, de 6 a 12 años, no tiene por qué aumentar, ni ligeramente. Es importante que siga siendo moderado y que se equilibre con actividades físicas, tiempo al aire libre, tareas escolares y relaciones sociales cara a cara. Podría caber la posibilidad de utilizarlas hasta 2 horas al día, con un enfoque en contenido educativo y apropiado para su edad.

Para los adolescentes, de 13 a 17 años, el panorama cambia. Si bien necesitan acceso a Internet para la educación, y otras actividades en línea, es esencial establecer límites claros y fomentar un uso responsable. Se recomienda que el tiempo de pantalla no exceda 2 horas al día, y se aliente el equilibrio con actividades extracurriculares, tiempo en familia y descanso adecuado.

Recuerda que estos son solo puntos de referencia y que cada familia es única. Es importante observar las necesidades individuales, así como su comportamiento, actitudes y bienestar en general.

Además, la calidad del tiempo en línea es igualmente importante que la cantidad. Fomenta el consumo de contenido educativo, interactivo y enriquecedor, y mantente al tanto de las actividades online de tus hijos.

En resumen, encontrar el equilibrio adecuado en el uso de Internet es esencial para el desarrollo saludable de niños, niñas y adolescentes. Recuerda, que más allá de las palabras, tienen mucha más fuerza nuestras actitudes y comportamientos relacionados con el uso de las pantallas; les servirá de referencia en el futuro.